A ALCARAZ TAMBIÉN LE CRECEN LOS ENANOS

Noticia publicada en el El Plural

Críticas contra su gestión “dictatorial” y los cargos que ocupa su mujer
Descontento de los socios de la AVT con Alcaraz
V.V.
En el seno de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) no hay tanta unión y unanimidad como sus dirigentes quieren demostrar en sus múltiples manifestaciones y actos en contra, especialmente de la política antiterrorista de Rodríguez Zapatero. Al parecer, la agresiva gestión de Francisco José Alcaraz al frente de la organización, y la entrada de su esposa, Mamen Álvarez, como coordinadora de las áreas jurídica y de atención social, sin tener preparación académica para ello, no gustan a muchos de los miembros de la organización, que denuncian que su presidente se ha centrado en hacer manifestaciones, más que en atender las necesidades de las víctimas.
La revista Interviú publicó un reportaje en el que pone de manifiesto las desavenencias entre Alcaraz y muchos de los miembros de la AVT, que no ven con buenos ojos el rumbo que esta organización está llevando de la mano de su presidente. Muchos de los socios califican ya la gestión de Alcaraz de “dictadura” y aseguran que el líder de la AVT y su esposa “llevan la AVT como si fuera su cortijo”.

Abandonan la asociación:

Según los testimonios recogidos en la revista, ocho empleados de la AVT (la mitad de su plantilla) se han marchado de la organización “porque no soportaban las formas despóticas de Alcaraz y de sus colaboradores más cercanos”. Entre los trabajadores que han abandonado sus puestos se encuentran administrativos, trabajadores sociales, psicólogos, abogados y el jefe de prensa. Incluso uno de los escoltas de Alcaraz ha pedido un cambio de destino tras reiteradas discusiones con él. Al parecer, todo aquel que discrepa con él, “tarde o temprano es cesado”.

La mujer de Alcaraz:

Uno de los principales motivos de discrepancia dentro de la AVT tiene que ver con la entrada de la esposa de Alcaraz, Mamen Álvarez, en la organización, en 2003. Álvarez, que no es víctima del terrorismo, se unió a la asociación tras una Asamblea General Extraordinaria en la que se aprobó a mano alzada su admisión.

Aumento del censo:

Un año después, con Alcaraz ya como presidente, se cambiaron los estatutos de la AVT para poder asociar a personas no relacionadas en primer grado con las víctimas. Desde entonces, el censo de la AVT ha aumentado en más de mil socios, y cuenta actualmente con un total de unos 3.500. Entre los nuevos asociados están dos hermanos de Alcaraz, que reciben prestaciones sociales.

Coordinadora jurídica y de atención social:

Otra de las medidas más polémicas que tomó el presidente fue la de nombrar a su mujer coordinadora de las áreas jurídica y de atención social, dos de los departamentos clave de la AVT. Álvarez, que no tiene la formación académica adecuada para desempeñar estos cargos, asegura que realiza el trabajo de manera voluntaria, sin cobrar por ello, aunque cualquier voluntario de la AVT puede recibir dietas y manutención sufragadas por el Ministerio de Interior, hasta un máximo de 103 euros diarios.

¿Manifestaciones o prestaciones sociales? :

Además, muchos de los socios critican que el gran esfuerzo personal y monetario que supone la preparación de las manifestaciones (para la organizada por el PP contra la aplicación de prisión atenuada a De Juana compraron, por ejemplo, 20.000 banderas de España para repartir entre los asociados) está suponiendo la desatención de otras áreas de la AVT. Sin ir más lejos, algunas víctimas han criticado que no tienen el acompañamiento que deberían en los juicios, y sólo hay dos psicólogos para atender a los 3.500 socios.