Trágico accidente, trágico atentado terrorista...................................Seguimos dándole vueltas a la frase qué por tercera vez utiliza Zapatero. La primera vez lo hizo el mismo día del atentado.
Lo que se cuestiona es la palabra "accidente". Como ha dicho posteriormente el secretario de comunicación: "no se puede considerar lo de Barajas como un accidente", aunque Zapatero lo haya dicho ya tres veces. Nuestra querida presidenta de la Comunidad, que de lapsus sabe mucho, ha interpretado que se trata de eso, de un lapsus que ha tenido el presidente del Gobierno, quizás traicionado por el subconsciente.
Pues vamos al diccionario de la Real Academia de la Lengua y veamos lo que dice de la "tenebrosa" y "tendenciosa" palabra:
1. m. Cualidad o estado que aparece en algo, sin que sea parte de su esencia o naturaleza.
2. m. Suceso eventual que altera el orden regular de las cosas.
3. m. Suceso eventual o acción de que involuntariamente resulta daño para las personas o las cosas
¿Que hay de extraño en que Zapatero considere un "accidente" lo que ha pasado el sábado pasado?.
En los tres significados que he mencionado se puede encontrar la explicación de la expresión qué el presidente ha dado al suceso, siempre y cuando lo situemos en el espacio y coyuntura política en que se ha producido.
Estábamos desde marzo en un periodo de "alto el fuego permanente". ETA, en procesos similares que ya se dieron en el pasado, avisó de su ruptura antes de cometer nuevos atentados. Era por tanto la primera vez que no la hacía.
¿Podíamos fiarnos de ETA?. Teniendo en cuenta lo que anteriormente he mencionado, sí. No digo fiarnos de una banda de asesinos, no, pero: ¿Por qué esta vez tenían que atentar sin aviso previo de la ruptura de la tregua? ¿Rompía ETA con los explosivos el orden regular de las cosas? En ese momento, sí.
Y ahora, la tercera connotación, la más peliaguda, la más cínica si se quiere de la interpretación: ¿fue involuntario causar daño a personas?.
De repente, el día 30 aparece algo que "altera el orden regular de las cosas", un suceso, el atentado. Y entiendase que el orden regular de las cosas es: "el alto el fuego". En ese orden regular de las cosas, y perdón por ser reiterativo, hace 40 años que existe la ETA, y desde entonces se ha dedicado a matar cuando le ha parecido conveniente. Pero en ese "orden" hubo momentos como el que se vivía desde hacía nueve meses, un tiempo sin atentados. ¿Podemos entonces considerar el atentado como un accidente?
De repente, el día 30 aparece un atentado (cualidad o estado) qué no forma parte de la esencia o naturaleza de algo (ese algo es el alto el fuego permanente). Pero insisto, ese algo, es un estado temporal, que se rompe sin previo aviso.
En cuanto a la involuntariedad del acto que resulta en daño a personas o cosas, está claro que no es admisible calificar la acción de ETA como accidental. Pese a esto se ha hablado de que la banda terrorista sólo quiso causar daños sobre las cosas, pero que sin quererlo, acabo con la vida de dos personas. Yo no creo en la involuntariedad. Cuando se coloca tal carga de explosivos en el aparcamiento de una aeropuerto hay que contar con víctimas mortales.
Evidentemente fue la mala suerte la que hizo que los dos ciudadanos ecuatorianos se encontraran dormidos en sus coches. Fue la mala suerte la que hizo que no se enteraran de los avisos para el desalojo de la zona. Pero ésto no puede valer para que los asesinos digan que "no fue su intención".
Dicho esto, creo que las dos primeras acepciones que tiene la palabra, sí pueden ser aplicadas al atentado de la T4.
Hoy en la radio han comentado qué Zapatero, tras oír las declaraciones de la señora Aguirre sobre sus lapsus y su subconsciente le ha comentado personalmente lo siguiente: "¿Sabes que no soy el único que tiene esos lapsus?": "Uno de tus vicepresidentes en la Comunidad de Madrid, también se refirió al atentado de Barajas como un accidente". Pues es cierto, la cadena SER ha emitido las declaraciones en las que se puede oír perfectamente dicha declaración. Debió ser efectivamente un lapsus y no una mala pasada de su subconsciente.
Despues de escribir esta entrada Zapatero ha dicho que todo se ha debido a un "lapsus linguistico".
Un consejo, humilde, con sentimiento: "Deje por favor de dar tantas explicaciones. Los de los "rebuznos", jamás podrán entenderle".
Estoy seguro que el subconsciente de Zapatero ¿le ha jugado una mala pasada?, pero, ¿tres veces? Pues sí, porqué en su cerebro todavía late la idea de que ETA, no cometería un nuevo atentado sin un aviso previo de "ruptura del alto el fuego".
Ahora bien, si pensamos qué el orden regular de las cosas era un momento de la vida social y política de España en que no existía un alto el fuego permanente; si pensamos que la ETA en anteriores situaciones similares lo rompió sin previo aviso, causando víctimas mortales; si pensamos que en la última reunión qué mantuvieron miembros del gobierno y de la banda terrorista, los asesinos comunicaron que podrían matar en cualquier momento, entonces sí, entonces podemos pensar que lo qué ocurrió el día 30 no fue un accidente.
Habrá qué estar entonces atentos a lo que pase en el futuro, qué será el que nos diga si Zapatero tiene o no subconsciente, y lo más importante, nos dirá si tiene o no cerebro.
Alguien podrá pensar que el descebrado soy yo por plantear estas cuestiones. Lo puedo aceptar sin ninguna crítica ni comentario. Todo dependerá de lo que cada uno entienda por "orden regular de las cosas", y de lo que considere que es parte o no de ese algo que se llama existencia.
Será entonces el momento de plantearse si el terrorismo, el hambre, la guerra, el odio, la maldad, la violencia, o la explotación son o no accidentes del natural fluir de nuestras vidas.
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1 comentario:
Una excelente exposición del significado de la tan utilizada palabreja.
Saludos.
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