5 de marzo de 2007

ALGO NO VA BIEN...




...Es mi apreciación desde algún tiempo, pero bueno, no dejaba de ser una sensación que nacía del enfrentamiento dialéctico y demagógico desde los medios de comunicación, los del ver, oír y leer.
Nuestros tertulianos habituales llevan tiempo tirándose los trastos, imitando a los políticos. No será necesario decir que desde un lado más que desde el otro, aunque siempre se podrá decir que es una opinión subjetiva, claro.
En la calle, la ciudadania también mantenía sus polémicas, pero casi siempre en tono distendido, a veces fervoroso, hacía una u otra idea, pero no se palpaba en el ambiente lo que estoy detectando desde que a De Juana se le ha aplicado el segundo grado.
Ayer, charlaba tranquilamente con el dueño del bar en que suelo desayunar sobre el tema en cuestión. Él pensaba que el gobierno ha cedido al chantaje y que De Juana debería haber sido entregado a los familiares de sus 25 víctimas. Creo que ya en otra ocasión me había dado tan peregrino argumento. Yo le preguntaba si había leído los dos artículos que publicó en su día en Gara por lo que fue condenado a 12 años, condena que me parecía exagerada; no, no los había leído. Le pregunté si sabía algo del último informe médico sobre el peligro de muerte del etarra; no, no había leído. Le pregunté si ha oído los argumentos que ha dado el gobierno; no, no los había oído. Yo intentaba explicarle lo del cambio de la pena de 12 años a 3, que ya había cumplido los 18 años a los que estaba obligado por el código penal que le condeno a 3000 años... Todo en un tono afable y cordial. Le dije que si prefería entregar a los etarras un héroe a un mártir...A mi lado desayunaba un empleado de una tienda próxima al bar, al que conozco de vista. Desayunaba, mientras se ponía al día leyendo las páginas del Marca. En un momento se giró hacía mi y me dijo: ¡quieres dejar de decir gilipolleces, rojo de mierda! Tan sólo le conteste: "a ti, quién coño te ha dado vela en este entierro". La cosa no pasó de ahí. Yo seguí con mi café, y el camarero, volvió a poner desayunos. Hoy le he vuelto a ver, como siempre, leyendo el Marca.
Ayer, cogí un taxi desde Moncloa a la clínica. Reconozco que no me gusta hablar con los taxistas, así que, cómo se me nota, casi nunca entablan una conversación conmigo. El de ayer por la mañana llevaba una emisora de radio puesta, en la que unos tertulianos se tiraban a degüello sobre Jaureguí, que daba la cara sobre el tema De Juana. "Chantaje político" eran las palabras que más se escuchaban. Jaureguí decía reconocer que la medida era impopular, pero que en política, a veces, este tipo de decisiones hay que tomarlas . Tras intentar razonar con la jauría, ha sacado a colación las liberaciones de presos que se produjeron durante el gobierno Aznar, que los socialistas aceptaron sin rechistar. Hasta el momento en que ha hablado del etarra Bilbao, que un año después de ser liberado cometió un nuevo asesinato, el taxista no había dicho nada. Pero en ese momento ha abierto la boca. Afortunadamente estábamos llegando a mi destino. Esto es lo que ha soltado: ¡estos socialistas de mierda son unos hijos de puta, y unos cabrones!. Pues eso. Yo no he dicho nada de nada, tampoco me hubiera escuchado. He pagado, sin propina, claro, y me bajado.
Ayer comí con un conocido, PPero él. En la sobremesa los mismos argumentos sobre el tema de De Juana. Los suyos y los mios, claro. Pero ha ido más allá, sacando el tema de la memoria histórica, que para él, no es más que el deseo de remover la mierda por parte de Zapatero. Según él, quiere vengar a su abuelo. Sobre las liberaciones de etarras por parte del PP, pues bueno, que el pasado no es lo importante. Que lo importante es lo que pasa ahora, con el resurgimiento del separatismo etarra, y la claudicación de Zapatero ante Otegui y compañía. Me ha comentado que el día 10, Rajoy ha convocado una manifestación. Le he contestado que una gran decisión, ya que ese día también se ha convocado otra en la calle Génova. Ya, pues se puede liar la de Dios, ¡vaya idea!, me ha contestado. Pero..., le he dicho: ¿quien ha hecho la convocatoria antes? Da igual, me ha respondido, las manifestaciones siempre son los sábados. ¿Y por qué los tuyos van a ir a Génova a liarla contra la gente que vaya allí? Hombre es la sede del PP, es una provocación. Ya, le he contestado y el otro día cuando unos cuantos energúmenos fueron a Ferraz, la sede del PSOE, ¿te hubiera parecido bien que hubiesemos ido a "dialogar" con ellos? La callada por respuesta. Se le veía sin argumentos.
Después le he comentado que el día 17 hay una manifestación contra la guerra. ¿La de Zerolo?, me ha preguntado. Pues no sé, la convoca el PSOE, IZ y una cuantas organizaciones más. ¿Contra la guerra?, sí, contra la guerra. ¿Y lo de Afganistan no es una guerra?, pues sí, le he contestado, yo creo que sí, pero diferente a la de Iraq...¿Habrá alguna pancarta para que España retire las tropas de la guerra de Afganistan?...Sabrás que allí ha muerto una soldado española. Sabrás que lo del helicóptero aquel que se cayó y en el que murieron 17 soldados fue por disparos y no por un fallo mecánico. ¿Y quién te lo ha contado le he preguntado? Los que dicen la verdad, me ha contestado. Ya, ¿y en el Yak 42 de Turquía cuantos murieron? El pasado no es importante, me ha contestado.
Bueno, no sigo, que el final, os lo podéis imaginar.
Algo no va bien...
Esta mañana en la SER, he oído que Nacho Escolar, había publicado un documento histórico sobre un artículo que apareció en El Mundo en 1990, en referencia a la huelga de hambre de un GRAPO, que se acompaña de un artículo de opinión que hacía el mismo periódico ese día.
Pues eso...La amnesia, el cinismo y la hipocresía. Lo de siempre, aunque al PP le empiezan a crecer los "enanos". ¿Por qué será?
Soy normal y sensato, no me siento derrotado por ETA, ni quiero aceptar su chantaje. Apoyo la política "indecente", "inmoral", "indigna", "poco reconfortante" e "ineficaz" del gobierno. En conclusión, Sr. Rajoy, no iré a su manifestación del sábado.

1 comentario:

Gracchus Babeuf dijo...

En los bares y en los taxis, yo también mantengo la boca callada. ¡Cómo tienen que estar las cosas para callarme!